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¿Qué es el oligopéptido 177? ¿Es eficaz? Y, lo que es más importante, ¿es bueno para la salud de tu piel?

¿Qué es lo que yo, Hannah, considero seguro en los productos para el cuidado de la piel?

Mis criterios difieren de los de la FDA, una gran agencia, pero carente de presupuesto. ¿Qué considera seguro la FDA? Mientras las afirmaciones sobre el producto estén cuidadosamente redactadas y el ingrediente NO se utilice como medicamento (con o sin receta), la FDA no intervendrá a menos que empiecen a aparecer informes sobre efectos secundarios indeseables. Esta es la laguna jurídica que la industria del cuidado de la piel utiliza como protección cuando vende ingredientes nuevos y no probados. La industria se ampara en que los ingredientes no penetrarán en la piel y en las bajas concentraciones utilizadas (partes por millón, ¡no por ciento!). Eso está bien para los péptidos cuando son cortos, no activos y fácilmente descomponibles por las enzimas de la piel. Pero es una suposición, y no me gustan las suposiciones. Por eso en Skin Actives utilizamos péptidos que han demostrado ser seguros y tener un mecanismo de acción claro.

Tuve que averiguar qué era el oligopéptido 177. Como la nomenclatura INCI usa oligopeptide, polypeptide, y todos los números del 1 al infinito con inmensa despreocupación, me pongo ansiosa cuando veo un nuevo número. Es cuestión de suerte averiguar a cuál corresponde, porque muchos no se listan por secuencia, y es la secuencia de aminoácidos lo que importa. Ocurre que, con 20 aminoácidos utilizados por el ser humano en las proteínas, se puede obtener un número infinito de péptidos que contengan esos 20, o sólo algunos de ellos, en cualquier secuencia. La acción de esas cadenas de aminoácidos dependerá estrictamente de la secuencia, que es como se determina la arquitectura espacial, y dirá si un péptido pasará desapercibido (la mayoría de ellos lo hace) o si nuestro cuerpo tiene receptores que reconocen la distribución espacial de los átomos. Es la idea de “la llave y la cerradura”. Si tratás de usar la llave equivocada en tu puerta, terminarás quedando a la intemperie.

En este caso tuve suerte. El oligopéptido 177 es un péptido sintético de 33 aminoácidos cuyas secuencias repiten un fragmento de la glicoproteína eritropoyetina (EPO). No existe en nuestro organismo. La función principal de la EPO es la estimulación de la producción de glóbulos rojos (eritrocitos), pero tiene otras funciones, como la promoción de la regeneración de tejidos y la protección celular (evita la apoptosis o autodestrucción celular). La idea es que tomar un trozo de la proteína entera (en lugar de la totalidad) puede evitar el efecto principal de la EPO sin perder el efecto curativo. Esto estaría mediado por la unión al receptor CD90 Thy-1 (THYmocito antígeno diferenciación 1). Según la publicidad, “el oligopéptido-177 mostró efectos beneficiosos significativos contra los signos del envejecimiento cutáneo, el acné y la irritación inducida por los rayos UV”. Esto se mostraba en la solicitud de patente, que utilizaba el resultado de un ensayo en el que participaron cinco (¡5!) sujetos.

Esta es la lista completa de ingredientes

Agua, triglicérido caprílico/cáprico, pentilenglicol, propilenglicol, glicerina, fosfatidilcolina hidrogenada, sorbitol, acetato de tocoferilo, butilenglicol, manteca de karité, goma
xantana, pantenol, carbómero sódico, Alcohol, Jugo de Hoja de Aloe Barbadensis, Proteína de Arroz Hidrolizada, Palmitato de Retinol, Aceite de Semilla de Girasol,
Escualano, Fenoxietanol, Colesterol, Lecitina Hidrogenada, Palmitato de Ascorbilo, Carbómero, Ceramida NP, Lecitina, Proteína de Soja, Superóxido Dismutasa, Hidróxido
Sódico, Alanil Glutamina, Arginina, Ceramida NG, Ácido Cítrico, Dextrano, Glicina, Lisina, Ácido Oleico, Ácido Palmítico, Palmitoil Tripeptido-8, Fenilalanina, Prolina, Extracto de Scenedesmus (un alga verde), Ácido ascórbico, Etilhexilglicerina, Benzoato sódico, Tocoferol, Extracto de semilla de mostaza blanca, EDTA disódico, Oligopeptide-177, Ascorbato sódico, Sulfato sódico de dextrano, Sorbato potásico.

“¿Ve la Sra. Wells alguna diferencia tras su uso regular? “No”, dijo. “Realmente no creo que ninguno de estos productos vaya a marcar una diferencia notable en tu aspecto.
Pero me gusta cómo se sienten en la piel. No producen reacciones negativas en mi piel”. Todo un espaldarazo para un producto que se vende a 96 dólares por media onza líquida (15 ml).

Esto me lleva al punto de que la industria del cuidado de la piel a menudo hace dos cosas mal al mismo tiempo cuando corre en busca de ganancias: usa ingredientes potencialmente dañinos y descuida los buenos. ¿Por qué utilizar uno no probado (a menos que a cinco personas les parezca un buen experimento) cuando se pueden utilizar las proteínas que se encargan de la cicatrización en la vida real? ¿Por qué descuidar el factor de crecimiento epidérmico (EGF) y el factor de crecimiento de los queratinocitos (KGF)? Porque no se pueden patentar y no son nuevos. ¿Cómo entusiasmar a los famosos con algo tan antiguo como la humanidad?

En resumen: puede que el Dr. Augustinus Bader se sintiera desafortunado de niño por su nombre, pero de adulto debió de adivinar que ese nombre funcionaría en las etiquetas de los productos para el cuidado de la piel. ¿Qué hace famoso a Augustinus mientras que yo, Hannah, sigo siendo un “secreto bien guardado”? Puedo decirles por qué: él es un innovador, y yo no. Él vende un producto que contiene ingredientes nuevos, y a la industria le encanta lo “nuevo”.  Yo no presumo de ser más inteligente que la Naturaleza. Además, el NYT decidió que se merecía un largo artículo porque los famosos habían invertido en la marca. Como dice el artículo, “es parte de la historia de origen de la marca”.

Hannah

 

Traducido por la Dra. Cecilia Hidalgo