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El segundo cromosoma X, el X “inactivo” de las mujeres, puede que sea no tan inactivo pero si problematico

En los seres humanos, las células femeninas poseen dos cromosomas X, uno inactivo. El cromosoma inactivo tiene un aspecto diferente y se denomina cuerpo de Barr. Las células masculinas poseen un cromosoma X activo y un cromosoma Y activo.

Las afecciones autoinmunes en las que el sistema inmunitario ataca por error a las células del organismo son cuatro veces más frecuentes en las mujeres. Durante los últimos 40 ó 50 años, los investigadores han buscado el desencadenante de la autoinmunidad sesgada por el sexo. Nuevas investigaciones sugieren que los cromosomas X silenciosos podrían albergar la respuesta.

¿Cómo se silencia el cromosoma X extra? Un ARN no codificante, producido por la transcripción específica del cromosoma X inactivo (XIST), forma un complejo con unas 80 proteínas unidas a él, este complejo silencia el cromosoma X inactivo. La hipótesis era que el complejo ARN-proteína XIST podría estar detrás del sesgo femenino de la autoinmunidad, ya que el XIST no se expresa en los varones.

En base a investigación con ratones y a ingeniería genética, se descubrió que la expresión de XIST en ratones macho alteraba los anticuerpos y otro aspecto del sistema inmunitario, las células inmunitarias adaptativas. Entre los cambiosroducidos, los niveles de proteínas que regulan las células B que producen autoanticuerpos y suprimen la autoinmunidad descendieron en los ratones macho con XIST y varias proteínas que controlan la reactividad de las células T fueron suprimidas. La supresión de las proteínas que previenen la autoinmunidad podria crear linfocitos B y T más agresivos ante las proteínas del propio organismo.

En los seres humanos, se encontraron niveles más altos de autoanticuerpos contra 40 proteínas asociadas a XIST en personas con enfermedades autoinmunes, sugiriendo que el complejo ARN-proteína XIST también puede desencadenar la autoinmunidad en los seres humanos.

Es dificil diagnosticar los trastornos autoinmunes, ya que distintas afecciones suelen compartir síntomas similares. Las buenas nuevas es que algunos marcadores de autoanticuerpos que ayuden a precisar el diagnóstico podrían ayudar a los médicos a tratar mejor a sus pacientes.

Por muy “básica” que sea la ciencia, a la larga aclara los mecanismos de la enfermedad y abre posibles soluciones y curas. ¡Demos gracias a la ciencia!

 

Referencia
Dou DR, et al. Xist ribonucleoproteins promote female sex-biased autoimmunity. bioRxiv. 2023. https://doi.org/10.1101/2022.11.05.515306. Nota: este es un pre-print, antes de ser publicado tendrá que pasar por la revisión por pares.

 

Traducido por la Dra. Cecilia Hidalgo