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¿Cosméticos neuroactivos? ¿Psicodermatología? El uso de plantas en la publicidad del cuidado de la piel.

No, no te has perdido el nacimiento de nuevas ramas científicas: esas palabras son sólo publicidad de la industria del cuidado de la piel, donde, por desgracia, la mayor parte de la creatividad ocurre en el departamento de publicidad (no en el laboratorio de diseño de fórmulas).

El “cosmético neuroactivo” en este caso es el extracto del fruto de Zanthoxylum alatum (tumbru. pimienta timut, pimienta de Sichuan). La pimienta timut crece como arbusto en el extremo sur del Himalaya, pero también crece en Pakistán, Japón, Corea y otros lugares del sudoeste asiático. Los frutos se secan al sol tras la cosecha y se utilizan como especias para platos tradicionales. Los frutos de la pimienta timut también se utilizan como remedio tradicional para el dolor de muelas y otras dolencias.

Figura. Zanthoxylum alatum.  Curtis’s Botanical Magazine, London., vol. 144, 1918.

En Skin Actives nos tomamos muy en serio las plantas y sus metabolitos secundarios. A menos que creas en el amor fundamental de la Madre Tierra por sus humanos (yo no lo creo), sabrás que las plantas y los animales tienen muchas sustancias químicas que son peligrosas, incluso letales, para nosotros. Muchas sustancias químicas vegetales son beneficiosas, pero la carga de la prueba es pesada, como tiene que ser; la seguridad es lo más importante y la pimienta timut probablemente también lo sea: un ingrediente del mix chino “cinco especias”; su uso como especia indica que probablemente sea segura si se la usa en pequeñas concentraciones.

¿Por qué llamar a esta especia “neuroactiva”? Parece que alivia los síntomas de la “depresión” en ratas de laboratorio, de ahí el “salto” que supone que pueda hacerlo en humanos cuando se la utiliza de forma tópica. ¡Eso sí que es un salto!

En nuestros cuartos de baño tenemos ejemplos de sustancias químicas vegetales neuroactivas, como el mentol, una sustancia química que activa los receptores TRPM8 sensibles al frío en la piel y en la mucosa y nos da una sensación de frescura. También hay una larga lista de sustancias químicas vegetales que tienen profundos efectos en el cerebro humano, algunas bien conocidas. Son bien conocidos los efectos a largo plazo de las sustancias químicas vegetales que pueden unirse a los receptores neuronales. Caveat emptor (“¡Tenga cuidado quien compra!”).

Metabolitos secundarios, las sustancias químicas vegetales que no intervienen directamente en el crecimiento, el desarrollo o la reproducción de la planta (como la clorofila, la celulosa o el Rubisco) están presentes en todas las plantas superiores. Hace más de 100 años, Ernst Stahl, pionero de la ecofisiología, demostró que los metabolitos secundarios sirven como compuestos de defensa contra caracoles y otros herbívoros. En aquella época, otros botánicos preferían la explicación más sencilla de que los metabolitos secundarios eran productos de desecho del metabolismo primario, pero hoy en día se favorecen las explicaciones adaptativas para explicar la existencia y diversidad de los metabolitos secundarios.

Las plantas no pueden huir cuando las atacan caracoles, insectos o herbívoros vertebrados, y no tienen un sistema inmunitario que las proteja cuando las atacan bacterias, hongos o virus. Los herbívoros y los microbios ya existían cuando las plantas tuvieron que desarrollar estrategias de supervivencia. Al igual que otros organismos inmóviles o de movimientos lentos (como los anfibios, las esponjas marinas o los corales), las plantas han desarrollado sustancias químicas de defensa para protegerse de sus enemigos o acabar con ellos. Muchos alcaloides representan adaptaciones que han aparecido durante la evolución por selección natural para protegerse de virus, bacterias, hongos, plantas competidoras y herbívoros.

A veces, las sustancias químicas tienen funciones duales, actividades tanto atractivas como defensivas: las antocianinas o los monoterpenos pueden servir para atraer insectos en flores que requieren polinización, pero son insecticidas y antimicrobianos al mismo tiempo. Además, algunos metabolitos secundarios también desempeñan funciones fisiológicas, por ejemplo, los alcaloides y los péptidos (lectinas, inhibidores de proteasas) pueden servir como compuestos móviles y tóxicos de transporte y almacenamiento de nitrógeno. Los fenólicos, como los flavonoides, pueden funcionar como protectores UV o antioxidantes. Muchas interacciones específicas de metabolitos secundarios con proteínas como enzimas, receptores, canales iónicos, proteínas estructurales y otros componentes celulares ya han sido estudiadas. A lo largo de la evolución, las estructuras de estas sustancias químicas defensivas se han ido configurando de forma tal que pueden imitar las estructuras de sustratos endógenos, hormonas, neurotransmisores u otros ligandos.

Este proceso se ha denominado “modelado molecular evolutivo” (como el que realizan los farmacólogos modernos en sus laboratorios). Por ejemplo, en condiciones fisiológicas, varios alcaloides adoptan en el espacio una configuración parecida a la de los neurotransmisores; muchos alcaloides son análogos o antagonistas de neurotransmisores y neuroreceptores. Estas sustancias químicas de defensa son útiles para las plantas contra la mayoría de los vertebrados, no sólo los humanos, porque los fundamentos de las vías de señalización neuronal son similares en los animales. Estos inhibidores tienen la ventaja de que los blancos moleculares correspondientes no están presentes en la planta que produce estos compuestos, por lo que no interfieren con la propia planta. Otros ejemplos de interacciones específicas son los glucósidos cardíacos (inhiben la Na+, K+-ATPasa), los glucósidos cianogénicos (bloquean la citocromo oxidasa en la cadena respiratoria) o los salicilatos (inhiben la ciclooxigenasa y la formación de prostaglandinas).

¿Cuál es el mensaje? Que la Madre Naturaleza no es necesariamente benévola con los seres humanos. Ser humano, ¡defendete!: utilizá sólo productos químicos o extractos de plantas cuya inocuidad está demostrada desde hace milenios. Confiá en los productos químicos una vez que se conozca bien el mecanismo de acción; asegúrate acerca del efecto a largo plazo de esos productos químicos en el cuerpo humano.

Podés utilizar los ingredientes derivados de plantas (cientos de ellos) que emplea Skin Actives por su seguridad y eficacia. En cuanto al Zanthoxylum alatum, podés viajar hasta el Himalaya y recoger frutos, comprar un cosmético neuroactivo o adquirir la especia en tu tienda local (buscá pimienta de Sichuan). No creo que el cosmético alivie la depresión, pero cocinar es bueno para vos y la especia te ayudará a preparar una rica cena.

Referencias

Barua CC, Haloi P, Saikia B, Sulakhiya K, Pathak DC, Tamuli S, Rizavi H, Ren X. (2018)  Zanthoxylum alatum abrogates lipopolysaccharide-induced depression-like behaviours in mice by modulating neuroinflammation and monoamine neurotransmitters in the hippocampus. Pharm Biol. 56:245-252. doi: 10.1080/13880209.2017.1391298.
PMID: 29569964; PMCID: PMC6130615.

Prakash B, Singh P, Mishra PK, Dubey NK. (2012) Safety assessment of Zanthoxylum alatum Roxb. essential oil, its antifungal, antiaflatoxin, antioxidant activity and efficacy as antimicrobial in preservation of Piper nigrum L. fruits. Int J Food Microbiol. 2012 153:183-91. doi: 10.1016/j.ijfoodmicro.2011.11.007. Epub 2011 Nov 15. PMID: 22137251.

Tang D, Liang Q, Zhang M, Li M, Zhang Q, Zhang S, Ai L, Wu C. (2022) Anti-depression effectiveness of essential oil from the fruits of Zanthoxylum bungeanum maxim. on chronic unpredictable mild stress-induced depression behavior in mice. Front Pharmacol. 13:999962. doi: 10.3389/fphar.2022.999962. PMID: 36204228; PMCID: PMC9530639.
 
Wink, M. (2003). Evolution of secondary metabolites from an ecological and molecular phylogenetic perspective. Phytochemistry, 64: 3–19. doi:10.1016/s0031- 9422(03)00300-5 

Traducido por la Dra. Cecilia Hidalgo