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Rosácea y óxido nítrico: la diferencia entre hipótesis y hechos

La piel de la rosácea se caracteriza por procesos inflamatorios desregulados (infiltrado perivascular o pilosebáceo), dilatación vascular, dilatación linfática, hiperplasia glandular y fibrosis, una mezcla de síntomas que refleja la complejidad de los mecanismos subyacentes. ¿Qué es lo que ocurre?

Todos preferimos respuestas sencillas, especialmente cuando se trata de situaciones muy complejas.  Se ha propuesto una respuesta sencilla para la rosácea. El óxido nítrico es un gas que se produce de forma natural en casi todas las células del cuerpo y que utilizan como señal los sistemas nervioso, inmunitario y cardiovascular. Como se sabe que el óxido nítrico dilata los vasos sanguíneos, se hipotetizó que podría desempeñar un papel en la rosácea.

Pero, hasta ahora, y a pesar de la intensa investigación sobre este tema, no hay pruebas de que el óxido nítrico sea un factor relevante en la rosácea. Tal vez en el futuro se encuentre alguna prueba, y quizá existan inhibidores de la producción de óxido nítrico que se puedan utilizar para controlar la rosácea. Puede que sí.

¿Y mientras tanto?

La rosácea parece tener su origen en la desregulación de los procesos inflamatorios.

Los componentes genéticos y ambientales pueden desencadenar el inicio y el agravamiento de la rosácea mediante la desregulación del sistema inmunitario, tanto innato como adaptativo. Diversos factores desencadenantes pueden provocar la liberación de varios mediadores de los queratinocitos (catelicidina, factor de crecimiento endotelial vascular y endotelina-1), los mastocitos (catelicidina y metaloproteinasas de matriz), los macrófagos (interferón-gamma, factor de necrosis tumoral, metaloproteinasas de matriz e interleucina-26) y las células T helper de tipo 1 (T H1) y T H17. Además, los factores desencadenantes pueden comunicarse directamente con el sistema nervioso cutáneo y, mediante neuropéptidos neurovasculares y neuroinmunes activos, provocar la manifestación de las lesiones de rosácea. ¡Qué complicado!

Lo que podés hacer

Sé que es una tontería recomendarte que evites el estrés emocional, pero algunos factores desencadenantes sí pueden evitarse, como la exposición al sol, el vapor caliente, la comida picante, el viento y el consumo de alcohol. Podés controlar la afectación por Demodex, que se da en algunos pacientes con rosácea. La erradicación del Demodex parece aliviar los síntomas de la rosácea, probablemente al prevenir la formación de citoquinas proinflamatorias.

¿Qué puede hacer por vos Skin Actives?

Probá los activos calmantes, como el regaliz, o el té verde con cafeína, que funcionaría como vasoconstrictor. Los extractos de centella asiática y castaña de Indias son bien conocidos por sus propiedades de refuerzo capilar. Muchos clientes han encontrado alivio utilizando 4-etoxibenzaldehído en una mezcla con una crema base. La azeloilglicina y el fosfato ascorbílico de magnesio son otras opciones. También podés probar nuestro reforzador de glicano-7, que puede ayudar a fortalecer la barrera cutánea y mejorar la respuesta inmunitaria contra el Demodex. Nuestros clientes también han informado sobre excelentes resultados con el biofermento de algas marinas aplicado por sí solo.

El espray de estroncio puede bloquear la reacción instantánea que muestra el suero de la rosácea cuando se entra en un lugar caluroso y con humo. El factor de crecimiento epidérmico parece ayudar con la rosácea. Hay muchos activos que ayudan con la inflamación. Hasta que no sepamos mejor cómo se produce la rosácea, tendremos que recurrir a productos que ayuden a aliviar el problema. He aquí cuatro productos de Skin Actives que vale la pena probar.


Suero reductor del enrojecimiento
Suero calmante de la piel
Crema ultra calmante
Hydramist

Referencias
Buddenkotte J, Steinhoff M. Recent advances in understanding and managing rosacea. F1000Res. 2018;7:F1000 Faculty Rev-1885. Published 2018 Dec 3. doi:10.12688/f1000research.16537.1

Para más información sobre la rosácea, consulta este posteo.

ADVERTENCIA: Estas afirmaciones no han sido evaluadas por la FDA y no pretenden diagnosticar, curar, tratar o prevenir ninguna enfermedad.

Traducido por la Dra. Cecilia Hidalgo