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Ingredientes para el acné buenos, malos y feos

Tengas 13 años o 31 años, debés pensar a largo plazo: tu piel será la barrera para protegerte del medio ambiente por el resto de tu vida (que espero sea larga y feliz).
Como debés pensar a largo plazo, tenés que tener cuidado cuando comprás un producto contra el acné. ¿Por qué? Porque muchas empresas no piensan en el largo plazo de tu piel cuando formulan sus productos. Muchas empresas solo piensan en ganar dinero rápido y es poco probable que sus intereses se ajusten a los tuyos.
¿Cuál tendría que ser tu objetivo? Controlar el acné sin dañar tu piel o envejecerla prematuramente. Y, sin embargo, muchos ingredientes utilizados por la industria son del tipo “rápido y furioso”, de los que aliviarán el acné temporalmente pero a la larga lo empeorarán y envejecerán la piel antes de tiempo.


He aquí hay una lista de algunos ingredientes buenos, malos y feos utilizados en la industria del control del acné:


Lo malo
El peróxido de benzoilo mata las bacterias rápidamente, pero también mata las células de la piel, lo que aumenta la mutación del ADN y la oxidación de los lípidos de la piel.
Algunos productos usan antibióticos que ya no son efectivos contra la infección pero siguen teniendo efectos secundarios en la piel.

Lo feo
El etanol limpia la piel con solventes que eliminan las bacterias mientras secan la piel y eliminan lípidos vitales para la preservación de la barrera cutánea. El etanol desnaturalizado es más barato para el fabricante pero contiene una variedad de productos químicos que pueden ser alergénicos.

El aceite de árbol de té mata las bacterias pero es alergénico y puede causar hiperpigmentación. ¡Que sea natural no significa que sea bueno para vos!

Lo bueno
Elegimos buenos ingredientes analizando la bioquímica, la fisiología y la bacteriología del acné y utilizamos productos químicos que controlan el acné sin dañar tu piel. Fijate en nuestros productos para el control del acné: contienen varios activos que funcionan bien juntos, en concentraciones que son efectivas pero no irritantes.
La nobiletina inhibe la síntesis del tipo de grasas (triglicéridos) que son alimentos para la bacteria del acné. También tiene actividad antibacteriana y fungistática.
El EGCG (galato de epigalocatequina de té verde) disminuye la secreción de sebo e inhibe el crecimiento de las bacterias del acné que se alimentan de él. También inhibe la actividad de la 5-alfa-reductasa y ayuda a mantener los poros abiertos, evitando la formación de granitos. Es un gran activo que además tiene actividad antioxidante. Asimismo, rompe las biopelículas bacterianas, lo que permite que los bactericidas alcancen y eliminen las células bacterianas.
Y aquí hay más:
El fucoidan, ñame silvestre, y la niacinamida tienen propiedades antiinflamatorias.
La diosgenina de ñame silvestre también puede ayudar a estabilizar el microambiente hormonal.
La niacinamida además ayuda a disminuir la sensibilidad de la piel.
El ácido salicílico, la salicina y el acetato de retinilo normalizan la queratinización.
El acetato de retinilo (vitamina A) también acelerará la renovación de la piel para ayudar a mantener limpios los poros.
El extracto de corteza de sauce (salicina) es antiinflamatorio.
La nobiletina, el coleo, la galanga y la granulisina disminuyen las bacterias del acné.
La granulysina es un activo especial desarrollado por Skin Actives para tratar la piel propensa a imperfecciones. Pertenece al conjunto de las proteínas lisosomales y ayudará a mantener a raya a la bacteria Propionibacterium acnes, creando agujeros en la membrana celular objetivo.
El zinc, la nobiletina y el EGCG ayudan a disminuir la secreción de sebo.
El extracto de té verde (EGCG) también ayuda a mantener los poros abiertos y es un antioxidante.
El beta-glucano de levadura es un potenciador de la respuesta inmune, lo que significa que entrenará a tu sistema inmunológico para estar en guardia contra las bacterias malas.
La palma enana americana, el zinc y el EGCG actúan como inhibidores de la actividad de la 5-alfa-reductasa.

ADVERTENCIA: Estas afirmaciones no han sido evaluadas por la FDA y no están destinadas a diagnosticar, curar, tratar o prevenir ninguna enfermedad.

 

Traducido por la Dra Cecilia Hidalgo.