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Extraído de The Collected Poems of Langston Hughes, publicado por Alfred A. Knopf, Inc. Derechos de autor © 1994 propiedad de Langston Hughes.

Que América (Estados Unidos) vuelva a ser América
Langston Hughes – 1902-1967


Que América vuelva a ser América.
Que sea el sueño que solía ser.
Que sea el pionero en la llanura
Buscando un hogar donde él mismo es libre.

(América nunca fue América para mí).

Que América sea el sueño que los soñadores soñaron.
Que sea esa gran fuerte tierra de amor
Donde nunca reyes intrigan ni tiranos pergeñan
Que cualquier hombre sea aplastado por uno de arriba.

(Nunca fue América para mí).

Oh, que mi tierra sea una tierra donde la Libertad
Es coronada sin falsa guirnalda patriótica,
Pero la oportunidad es real y la vida es libre,
La igualdad está en el aire que respiramos.

(Nunca ha habido igualdad para mí,
Ni libertad en esta “patria de los libres”).


Dime, ¿quién eres tú que murmuras en la oscuridad?
¿Y quién eres tú que trazas tu velo de un lado a otro de las estrellas?

Soy el pobre blanco, engañado y apartado,
Soy el Negro que carga las cicatrices de la esclavitud.
Soy el hombre rojo expulsado de la tierra,
Soy el inmigrante aferrando la esperanza que yo busco-
Y encontrando solo el mismo viejo estúpido plan
De perro come perro, de poderoso aplasta al débil.

Soy el joven, lleno de fuerza y ​​esperanza,
Enredado en esa antigua cadena sin fin
¡De lucro, poder, ganancia, de arrebatar la tierra!
¡De arrebatar el oro! ¡De arrebatar las formas de satisfacer la necesidad!
¡De explotar a los hombres! ¡De tomar su paga!
¡De ser dueño de todo por la propia codicia!

Soy el granjero, esclavo del suelo.
Soy el trabajador vendido por la máquina.
Soy el Negro, sirviente de todos ustedes.
Soy la gente, humilde, hambrienta, ruin-.
Hambriento aún hoy a pesar de aquel sueño.
Golpeado aún hoy, ¡oh, pioneros!
Soy el hombre que nunca pasó al frente
El trabajador más pobre traficado a lo largo de los años.



Sin embargo, soy yo quien soñó nuestro sueño fundamental
En el Viejo Mundo siendo todavía un siervo de reyes,
Quien soñó un sueño tan fuerte, tan valiente, tan cierto,
Que todavía hoy su poderosa audacia canta
En cada ladrillo y piedra, en cada surco removido,
Eso ha hecho de América la tierra en la que se ha convertido.
Oh, soy el hombre que navegó esos primeros mares
En busca de lo que sería mi hogar
Porque yo fui el que dejó la costa oscura de Irlanda,
Y la llanura de Polonia y la hierba de Inglaterra,
Y arrancado de las costas del África Negra, vine
Para construir una “patria de los libres”.

¿Los libres?

¿Quién dijo los libres? ¿Yo no?
¿Seguro que yo no? ¿Los millones hoy sin trabajo?
¿Los millones derribados cuando hacemos huelga?
¿Los millones que no tenemos nada por nuestro sueldo?
Por todos los sueños que hemos soñado
Y todas las canciones que hemos cantado
Y todas las esperanzas que hemos abrazado
Y todas las banderas que hemos izado,
Los millones que no tenemos nada por nuestro sueldo-
Excepto el sueño que está casi muerto hoy.

Oh, que América vuelva a ser América-
La tierra que aún nunca ha sido-
Y sin embargo debe ser- la tierra donde cada hombre es libre.
La tierra que es mía- de los pobres, de los indios, de los Negros, YO-
Los que hicieron América.
Cuyo sudor y sangre, cuya fe y dolor,
Cuya mano en la fundición, cuyo arado bajo la lluvia,
Deben recuperar nuestro poderoso sueño nuevamente.



Por cierto, nombrame con cualquier nombre feo que elijas-
El acero de la libertad no marca.
De aquellos que viven como sanguijuelas de la vida de la gente,
Debemos recuperar nuestra tierra nuevamente,
¡América!

Oh sí,
Lo digo claro,
América nunca fue América para mí,
Y sin embargo, pronuncio este juramento
¡América lo será!

Sin los vestigios y la villanía de nuestra muerte gángster,
La violación y la podredumbre del soborno, el sigilo y las mentiras,
Nosotros, la gente, debemos redimir
La tierra, las minas, las plantas, los ríos.
Las montañas y la llanura interminable-.
Todo, toda la extensión de estos grandes prados verdes:
¡Y hacer América otra vez!

 

Traducido por la Dra Cecilia Hidalgo