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Cobre: ​​si tu loción es azul, ¡tírala!

El cobre es, para los humanos (y para las plantas, y para muchos animales y microorganismos) un oligoelemento, un micronutriente. Lo necesitamos, pero en cantidades mínimas.
Hay mucho cobre a nuestro alrededor, incluso en el agua del grifo y en todos los alimentos. En resumen: no necesitamos cobre adicional para cubrir esa pequeña cantidad que se requiere para mantener nuestro cuerpo y nuestra piel funcionando como deberían.

Desafortunadamente, campañas publicitarias de larga data ha incorporado el cobre en el folclore del cuidado de la piel. De manera semejante, existe toda una industria dedicada a utilizar el efecto placebo para vender pulseras de cobre a personas que padecen artritis. El cobre puede ser útil en instalaciones públicas, donde los rieles de cobre y los picaportes de las puertas mantendrán alejados a los microbios.

Es tu elección caer en la trampa de la publicidad, pero tenés que recordar que el cobre, por muy esencial que pueda ser en concentraciones mínimas (partes por millón), SÍ será tóxico en concentraciones altas.

El cobre, un metal, es “color cobre”. Las sales de cobre contendrán ya sea Cu(II), azul, u óxido de cobre (I), rojizo. El péptido que usamos en Skin Actives en productos diseñados para acelerar la cicatrización de la piel tiene el complejo péptido/azul Cu(II). El producto final no será azul, aunque contenga Cu(II) azul, porque en la concentración de partes por millón el azul no se llega a ver.
¿El producto tendría que ser azul? ¡No! Las altas concentraciones requeridas para darle al producto un color azul serían tóxicas para la piel y tu cuerpo, que sin duda absorbería parte de ese cobre.

Algunas empresas han encontrado una manera de cubrir las expectativas del público que espera que un producto que contiene cobre sea azul: se pueden agregar colorantes azules libres de cobre; hay muchas opciones. Esto es también lo que hacen las empresas cuando te prometen oro muy caro en sus productos: añaden pigmentos de color dorado.

Cuando se agrega cobre a un producto para el cuidado de la piel, se dan varias alternativas. Se puede agregar una sal de cobre, como sulfato o cloruro. También se lo puede agregar como “sal peptídica”, un complejo de un péptido con cobre. La investigación, ya antigua, sobre los beneficios del cobre en la cicatrización de la piel se realizó con un tripéptido. Más tarde, se introdujeron otros péptidos en el cuidado de la piel. Esto se debió simplemente a disponer de la metodología y el equipo que permitía elaborar cualquier péptido sintético que se deseara, y la industria utilizó esto en sus planes publicitarios. Así, la industria del cuidado de la piel introdujo más péptidos sintéticos, generalmente sin evidencia científica, como la nueva “cura milagrosa” para el envejecimiento de la piel.

Skin Actives ofrece dos ingredientes “Hágalo Usted Mismo” que contienen cobre: ​​tripéptido de cobre y una mezcla que contiene tripéptido de cobre y un tetrapéptido. ¿Por qué? Estos dos son ingredientes populares y queremos que nuestros clientes HUM cuenten con la opción de usarlos (o no). Por favor, recordá que el hierro y el cobre promoverán la oxidación de la vitamina C, así que no los uses juntos en el mismo producto o en la misma rutina.

¿Qué se puede esperar de un producto que contiene suficiente Cu(II) como para darle un color azul? Toxicidad de la piel. Esto puede expresarse, a largo plazo, como más arrugas, hiperpigmentación y otros síntomas de envejecimiento. Nadie ha estudiado los efectos a largo plazo del envenenamiento por cobre en la piel, aunque gracias al uso experimental del cobre por parte de algunas compañías de “cuidado de la piel”, se está llevando a cabo un experimento de proporciones enormes con las muchas mujeres que siguen comprando y usando productos que contienen demasiado cobre.

¿No detectás conmigo un tufillo misógino proveniente de la industria?

Hannah

ADVERTENCIA: Estas afirmaciones no han sido evaluadas por la FDA y no pretenden diagnosticar, curar, tratar o prevenir ninguna enfermedad.

Traducido por la Dra. Cecilia Hidalgo