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Aceites para agregar a tu baño

Los aceites fijos o no volátiles son aceites como los que usamos para cocinar: ¡dales la bienvenida a tu baño, pero no te resbales! Tené cuidado al entrar y salir.
Los aceites esenciales son los que dan su fragancia a las flores. Tené cuidado si y cuando los agregues a su baño. No importa lo hermoso que quede el ambiente, podés terminar con picazón en la piel.
¿Por qué agregar aceites fijos a tu baño?
Si elegís los adecuados, vas a obtener múltiples beneficios.


1) Piel más suave
2) Nutrición
3) Efecto calmante para la piel que pica
4) Sin peligro de acné
5) Efecto antiinflamatorio


¿Qué aceite?
Mis favoritos son el de rosa mosqueta y el de granada, por su composición de ácidos grasos, perfecta para “reconstruir” la barrera cutánea. Mi super favorito es Every Lipid Serum, lo tengo siempre a mano.
¿Qué evitar?
El aceite de coco y otros que contengan ácidos grasos saturados, buen alimento para las bacterias del acné. Evitá el baño de burbujas, los detergentes necesarios para hacer buenas burbujas eliminarán los lípidos de la piel y debilitarán la barrera cutánea.
Mimate
¿Algo más para agregar? Elegí una fragancia o aceite esencial que sepas que a vos no te produce alergia.

¡Hacé que tu baño ilumine tu piel!
Agregá algunos cristales de ácido ascórbico, el efecto antioxidante complementará muy bien la nutrición que proporciona el aceite.


HUM: ¿Te sentís creativo?
Hacé tu propio aceite de baño con un buen aceite base como el de rosa mosqueta y agregale un poco de vitamina E y refuerzo antiox. Fijate bien en el bisabolol, tal vez te guste su fragancia y es un gran activo antiinflamatorio.

¿Por qué?
Tu piel se sentirá mejor, sanará más rápido y los buenos aceites te ayudarán con las arrugas y las estrías. La emoliencia ayudará con el eccema. Aún así, evitá los baños prolongados, especialmente si tenés eccema.

 


Las afirmaciones de esta página no han sido evaluadas por la FDA y no están destinadas a diagnosticar, curar, tratar o prevenir ninguna enfermedad.

 

Traducido por la Dra Cecilia Hidalgo